Bendicto XVI cumple hoy 85 años. No puedo dejar que esta fecha pase desapercibida. Resulta admirable que este anciano que hace unos años le pedía a Juan Pablo II retirarse para dedicarse a sus libros y a tocar el piano, esté pastoreando a su grey por todo el mundo... ¡hasta Cuba!
Cualquiera a su edad estaría sentadito tomando el sol en un parque, como mucho... jugando a la petanca. A él lo hemos visto esta Semana Santa, en cada uno de los actos litúrgicos que ha presidido, al pie de la Cruz.
Para querer a alguien hay que conocerlo. Para querer a este Santo Padre, sólo hay que seguirlo, escucharlo y leerlo. Porque no cesa de hablarnos. Y cada una de las palabras que nos dedica están al alcance de cualquier fortuna, sólo hay que visitar la web oficial del Vaticano.
En tres días celebraremos un nuevo aniversario de elección como Papa. Con motivo de esta doble celebración, la web Catholic.net ha tenido la feliz idea de ofrecernos la oportunidad de poder felicitar a Benedicto XVI. El enlace, aquí.
Si Juan Pablo II definía a los judíos como "nuestros hermanos mayores", Benedicto XVI va mas allá y los llama "nuestros padre en la fe".
Sólo los hombres santos consiguen que se haga posible la verdadera Paz.